Hace unos meses tuve la oportunidad de compartir una mañana con Antonio Hernández Ramos, secretario del Ayuntamiento de Santibáñez el Alto. Este personaje polifacético de Sierra de Gata, que cultiva las más diversas aficiones que le convierten en un nativo atípico serragatino, con una humildad no muy común en la sierra y unos conocimientos que nos superan a algunos de los que por allí aterrizamos tuvo la gentileza de enseñarme los rincones más escondidos de una villa con condición de Realengo y que sumerge sus raíces en las profundidades de la Vetonía. El libro que escribió hace ya unas cuantas décadas me ha servido de manual en muchos de mis estudios.
Inscripciones en el muro de la casa de Maestre de Alcántara.
Sillar de granito con inscripciones arábigas según testimonio de
Alfonso Naharro en una de sus visitas a la villa
Genitales femeninos en la puerta de entrada al castillo de Santibáñez
Genitales masculinos en la puerta de entrada del castillo
El Moro
La mora
Tumba antropomórfica
Entrada al castillo
Fuente para las lavanderas de Santibáñez
Marcas de cantero
El Rollo de Santibáñez