La iglesia del Buen Varón de la localidad de Hoyos conserva uno de los escasos ejemplos del arte románico en tierras extremeñas. La singularidad de su puerta de acceso principal confirma la presencia cristiana en estas tierras de Sierra de Gata entre los siglos XII y XIII. Este claro ejemplo de arte tardorománico permite rastrear entre sus paredes la presencia de pobladores anteriores en estas tierras, como así lo demuestran las tres aras romanas que sirven de sillares en sus muros y que a buen seguro fueron desplazadas de sus emplazamientos originales, que no debían encontrarse muy distantes de donde se encuentra la actual parroquia.
La simpleza de este pórtico evoca tiempos de un ruralismo que giraba entorno a la agricultura y la ganadería, con unas sociedades sometidas a las severas reglas de un poder religioso que lo dominaba todo y cuyas enseñanzas quedaban articuladas en el frío espesor de unas rocas graníticas labradas por las manos humildes de canteros venidos de allende de las montañas serragatinas.
dos aras romanas anepígrafías situadas a la izquierda de la puerta,
sillar con cruceta grabada
Imagen de una mujer con un niño en el brazo derecho y un bastón o cetro en la izquierda, puede que sea la Virgen María
Columnas decoradas con pometeados y espígas
Capiteles con ornamentación vegetal y animal
Rosca del arco con temas vegetales, grandes flores a modo de rosetas con botón o sin botón central
Arco de medio punto
Los salmeres por encima de los capiteles exíben flores cuatripétalas y temas romboides enlazados
Fustes de las columnas extremas de la derecha dos imágenes, una es un hombre con un escudo redondo con espada, la otra parece ser que es la de una mujer con los brazos rotos
Ara romana con lunar funerario embutida en la fachada de la iglesis ( TONGIO. TANCINI. F. CELTIUS CILINI.F (A Tongio, hijo de Tancino, se lo dedicó Celtius, hijo de Cilino)
Sillar a la derecha con cruceta grabada
Imagen de una arpía que alude a las pasiones y los vicios (cuerpo y patas de ave rapaz, cabeza de mujer y cola de serpiente)
Capitel de la izquierda en el que se observa una serpiente enroscada entre hojas, símbolo del mal
Imagen a la derecha de mujer con brazos partidos
Capiteles de la derecha donde abundan los motivos vegetales a modo de palma
Capitel en el que se conserva parte del policromado de la piedra