lunes, 3 de agosto de 2020

UN PASEO FOTOGRÁFICO POR VALVERDE DEL FRESNO

Valverde del Fresno es una población de frontera con un crisol de gentes y costumbres entre la que destaca la conservación de la lengua típica de sus habitantes, El Valverdeiru.
Durante siglos la villa ha sufrido los embites de frontera típicos de dos reinos que han vivido siempre de espaldas. 
De las poblaciones de Sierra de Gata es de las de mayor tamaño y destaca últimamente por el enorme tamaño de muchas de sus casas; reciéntemente construidas por una comunidad de valverdeirus que ha prosperado al calor de la emigración y del negocio de la frontera.





De todos sus edificios destaca su iglesia en la que presumiblemente intervino Dª Pedro de Ybarra. Aunque no se conserva una arquitectura típica; ya que el modernismo que todo lo invade ha tergiversado en esta población la arquitectura tradicional de la localidad, si se conserva algún bello ejemplo de ventana geminada, ermita singular e incluso un imponente rollo jurisdiccional.





























Sin embargo, después de mi deambular por estas tierras de montaña durante mis cincuenta años de vida, con aquello que me quedo de Valverde del Fresno y que siempre permanecerá en mi recuerdo es el bar Inocencio. La primera vez que recalé allí fue en la década de los 80 de la mano de un íntimo amigo que me descubrió la Sierra más campechana y rural. Ese día nos dirigimos a Valverde desde Acebo con la clara intención de comprar tabaco americano, Winston de contrabando. 
Entramos con esa inocencia adolescente peliculera del que piensa que ha llegado al motel de carretera de la Ruta 66 y que va a realizar algo ilegal. Después de un par de tragos mi colega entabló conversación con el dueño y al poco rato le trajo un cartón de tabaco. 
Antes de irnos mi amigo me propuso comer algo allí, recuerdo que el salón era pequeño y un poco destartalado pero estaba a rebosar de gentes procedentes de los sitios más diversos. En las mesas de los comensales había una variedad tremenda de platos de comida; desde platos tradionales portugueses, con sus más amplias variedades de bacalaos a la bras, al horno, con besamel, a la canela, etc, etc.; hasta los apreciados langostinos regados con el afrutado sabor del Mateus Rosé.
Yo me dejé guiar por mi colega y probé desde las orejas en salsa, hasta la prueba de cerdo al estilo valverdieru; no sin dejarnos de obsequiar antes de irnos con una buena ración de langostinos a la plancha y un buen bacalao a la bras con varias botellas de vino. 
Desde aquella visita, el Bar Inocencio se convirtió en un clásico de nuestras andanzas estivales y antes de retornar a nuestros lugares de origen la despedida obligada anual siempre la finalizabamos allí y de la misma manera, con una comida de fraternidad al estilo serragatino.



 

domingo, 19 de julio de 2020

PLANTAS SINGULARES DE SIERRA DE GATA

"Plantas Singulares de Sierra de Gata", de Álvaro Tejerina Gallardo, es uno de los pocos libros que ha editado ADISGATA sobre Sierra de Gata. El trabajo en sí merece la pena y tiene una calidad excepcional. 
A lo largo de sus páginas uno disfruta de la infinidad de árboles y plantas que el autor, y los que han colaborado con él, nos descubren; porque muchas de ellas han pasado inadvertidas a nuestras miradas y paseos durante años; sin embargo ellos las han sabido poner en valor explicándonos sus características únicas. 
Desde las peonías de Salvaleón, pasando por la sequoya de Hoyos, o los saúcos de Acebo; el libro es un dispendio de colores y de fotografías que ensalzan una vegetación única, que sólo se puede dar en una zona como la Comarca de Sierra de Gata gracias a su peculiar microclíma.



domingo, 28 de junio de 2020

ERMITA DE LA CRUZ BENDITA,San Martín de Trevejo

Esta ermita conserva para mí un especial recuerdo; ya que cuando moceaba por la Comarca nos sirivió a mí y a mis amigos de refugio nocturno en aquellos veranos en los que nuestra curiosidad nos hacía completar rutas senderistas por los montes de Jálama, que nos obligaban a hacer noche en San Martín de Trevejo de manera improvisada.


El tejaroz que cubre la entrada principal con sus magníficos asientos pétreos nos sirvieron de camastro y de cubierta en las cálidas noches estivales de la década de los años ochenta del siglo pasado.


En aquellos veranos y en esta ermita fue mi primer contacto con A Fala. El letreo que se conserva a la entrada de la misma, escrito en la lengua vehicular de la mayor parte de la población de San Martín de Trevejo, nos sorprendió a unos jóvenes educados en el centralismo lingüístico del Estado Español de la época. Dicho letrero adosado a la fachada principal del edificio, además del consejo litúrgico que manifiesta, tuvo un carácter reivindicativo en un tiempo en el que las lenguas locales que no fuesen el castellano eran tratadas de manera despectivas o proscritas.  

PARROQUIA DE SANTA MARÍA MAGDALENA,Hernán Pérez

Parroquia levantado en mampostería que fue reforzada en las esquinas con sillares de granito. La fachada principal es entera de granito rematada en una imponente espadaña. El edificio cuenta con una planta rectangular de grandes proporciones y en los últimos tiempos ha sufrido ciertas invervenciones que han afeado en parte su estética.









Sin embargo como sucede siempre no deja de ser interesante visitar este edificio religioso de Sierra de Gata, que aunque no es de los más espectaculares de la zona si hay que decir que es de los más curiosos por el material empleado en su construcción, mampostería principalmente de pizarra, y porque todavía se observan restos de una esgrafiado que decoró en parte los muros de la parroquia.




ERMITA DEL CRISTO DE LA PAZ. Hernán Pérez

Es esta ermita un edificio sencillo sin el detalle ni la intervención de afamados canteros de siglos pasados. Levantado en su mayor parte en mampostería de pizarra, cuenta con algunas partes en sillería de granito que refuerzan en parte la construcción. La puerta principal cuenta con un arco de medio punto y en su tiempo debió estar cubierta por un tejaroz, del que tan sólo quedan las ménsulas. Tiene estructura de nave única dividida en dos tramos por un arco de medio punto.



Cuenta esta ermita con una rústica espadaña en la que una pequeña campana llamaba a la oración en siglos pasados.


No conserva Hernán Pérez espectaculares edificios religiosos, pero si conviene decir que los dos que se mantienen en pie, la ermita y la parroquia, tienen la particularidad única en nuestra comarca de haber sido construidos en su mayor parte en mampostería de pizarra, material muy raro de ver en las construcciones religiosas de nuestra sierra.

sábado, 27 de junio de 2020

ERMITA DEL CORDERO BENDITO, Acebo

Es la única ermita que queda en pie en Acebo y aunque siempre fue la del Cristo, cuando se derribó la del Coredero, en el actual ambulatorio de la localidad, a ésta se la pasó a denominar la Ermita del Cordero Bendito.
Tiene planta rectangular alargada, con la sacristía al lado de la Epístola. La capilla mayor es toda de sillería y sobre ella se eleva un cimborrio octogonal que resguarda la cúpula. el resto de la contrucción es de mamposteria; aunque en las esquinas se usó, como en muchas otras ermitas, sillares de granito. A los lados tiene dos contrafuertes que soportan los empujes del arco principal. La puerta es un arco de medio punto, que queda cubierta por un tejaroz moderno sustentado sobre dos columnas apoyadas en dos basamentos pometeados de raíz hispanoflamencas, que proceden del antiguo soportal del ayuntamiento de Acebo.



Custodia esta ermita una imagen barroca de un  Nazareno, El Cordero Bendito. Talla deciochesca anónima de gran expresividad y realismo, por la que los acebanos profesan una profunda devoción.

Nos cuenta un amigo que según él pudo ver en el archivo histórico municipal de la localidad, hoy en día ya desaparecido, esta imagen tiene un origen curioso. Parece ser que en cierto siglo la ermita del Cordero se incendió y la imagen del Santo a cuya advocación se encontraba dedicada se perdió; por este motivo los representantes municipales le encargaron a unos vecinos la compra de una nueva talla que sustituyese a la desaparecida. Estos abnegados vecinos viajaron hasta un taller de imagineria de la ciudad de Valladolid donde entraron en tratos con el escultor de turno. Una vez manifestados los deseos de compra y su poder adquisitivo el citado escultor les dijo que no podía satisfacer sus deseos; pero cuando los dos acebanos se aventuraban a abandonar el taller, el artista les alcanzó a la salida del mismo y les propuso la compra de un Ecce Homo que conservaba desde hacía varios años en el almacén del taller. Los dos vecinos se dieron media vuelta y siguieron al artesano hasta el lugar en la que se conservaba la magnífica talla. Una vez allí el escultor les explicó que aquella talla había sido encargada por una Cofradía sevillana, pero que cuando fueron a recogerla no la quisieron porque el Cristo tenía, debido al color de la imagen,  un aspecto demasiado semita para ellos.
A los acebanos ese tema no les incomodó, pero ellos lo que querían era un Cristo que portase una cruz a hombros y no uno que estuviese atado a una columna. El artista les dijo que eso no sería problema, que viniesen en dos días a buscarlo que ese inconveniente quedaría resuelto.
El escultor le seccionó uno de los brazos y se lo colocó en la posición necesaria para sustentar un cruz. De esa forma el problema quedó resuelto y los acebanos se llevaron al Azevo una escultura que forma parte del ideario acebano desde que tengo uso de razón.  


sábado, 20 de junio de 2020

ERMITA DEL HUMILLADERO, Gata


La Ermita del Humilladero se encuentra a la entrada de la Villa de Gata. La parte antigua de la ermita es la cabecera de la misma, la sección que se encuentra construida con mampostería enlucida y encalada fue añadida a finales del siglo XVII o quizás en el siglo XVIII con la idea de ampliar el espacio para una población en continuo crecimiento.






La parte original de la ermita fue construida en el siglo XVI con una perfecta sillería de granito que la vincula con la construcción de las imponentes parroquias de la zona. Ese primitivo edificio tiene cuatro contrafuertes esquineros que soportan la imponente bóveda crucería de este templo.



Cerca de la ermita se encuentra un crucero labrado a finales del siglo XVI, constituído por una columna toscana apoyada en un podio de tres escalones.