lunes, 14 de diciembre de 2015

CONVENTO DEL HOYO. Convento de la Virgen de Monteceli o Monte Coeli

Una de las maravillas de Sierra de Gata son los restos arqueológicos del Convento del Hoyo en Gata, también conocido por el nombre de Nuestra Señora de Monteceli o Monte Coeli.


Este convento franciscano fue un enclave importantísimo en la provincia seráfica que gobernó estas tierras durante siglos y cuya fundación la tradición atribuye al mismísimo Francisco de Asís y que fue visitado también por San Pedro de Alcántara.






Se cree que en 1399 ya existía un pequeño eremitorio en ese lugar rodeado de una exuberante vegetación y regado por un pequeño arroyo. La primera vez que se le citó fue en 1432 y en 1839 ya se encontraba en estado de ruina debido a la desamortización que se implantó en toda España.




A fecha de hoy se conserva el ábside eclesial con parte de sus bóvedas de crucería. Cerca del edifico principal se hallan los restos del claustro con arquerías de medio punto, además de un pequeño edificio que debió ser una pequeña ermita.




Los restos que se conservan en este enclave tan privilegiado de Gata nos indican la grandiosidad de un edificio y de una órden religiosa que marcó los tiempos durante siglos en nuestra Comarca.






Una de las curiosidades que se mantienen entre las paredes de este recinto conventual son los restos de un esgrafiado que se conservan entre los sillares de las paredes de este grandioso edificio. 


El acceso a los restos de este monumento puede resultar un poco complicado, entre otras cosas por la mala señalización con la que cuenta y que al senderista y al arqueólogo le pueden despistar; ya que las diferentes pistas forestales que se entrecruzan hasta llegar a él les pueden llevar a otros lugares, sin duda alguna interesantes pero que puede que no se encuentren entre sus objetivos.

sábado, 12 de diciembre de 2015

ÁRBOLES DE PIEDRA EN SIERRA DE GATA

En numerosas ocasiones, cuando hemos visitado pueblos como: Santibáñez el Alto, Torre de Don Miguel, Valverde del Fresno y Moraleja nos hemos encontrado con unas construcciones a las afueras de estas localidades realmente singulares y que los lugareños de estas poblaciones las conocen por el nombre de rollos.


Rollo de Valverde del Fresno

Gracias al trabajo publicado por el Museo de Cáceres “Los Árboles de Piedra, Rollos y Picotas de la Provincia de Cáceres”, año 2004, hemos podido adentrarnos en el curioso mundo de la justicia medieval y a la vez comprender la importancia y significación de estos monumentos que en un inicio se extendieron por la mayor parte de las villas de nuestro país.
Según el citado estudio, en un origen había que distinguir dos tipos de construcciones que tenían dos finalidades claramente diferenciadas, una era la Picota y la otra era el Rollo.



Picota de Penamacor (Portugal)

La Picota era un instrumento que se utilizaba claramente para condenar al escarnio público a todos aquellos que habían cometido cualquier tipo de delito menor, como podían ser (robo, fraude en las medidas, venta de productos en malas condiciones, etc….). En una sociedad como la medieval en la que no existía nada más sagrado que la honra, el exponer públicamente al infractor de un delito era como condenarle al ostracismo más absoluto.
El Rollo, en cambio, era un instrumento por el que se valían ciertas localidades para demostrar su condición de villa y su capacidad de dictar y aplicar leyes; es por ello que en algunos de estos rollo aparece un escudo que bien podía ser el del rey (como teóricamente sucede con el de Moraleja, cuyo escudo se atribuye a Felipe IV), bien el de un señorío, o como sucede con el de Santibáñez el Alto el de una orden  militar, como la de Alcántara.


Rollo de Moraleja


Con el transcurso del tiempo ambos instrumentos de nuestro sistema jurídico se fusionaron y permanecieron unificados durante siglos, hasta que con las cortes de Cádiz se dictó que ese símbolo del poder señorial debía desaparecer de todas aquellas villas y lugares del territorio nacional.
La estructura de todas estas construcciones son muy similares. Sobre una grada de sillares se eleva una columna que se ve rematada normalmente con unos elementos decorativos que suelen tener su origen en el bestiario medieval. En algunos casos, como hemos comentado anteriormente, suelen tener representados un escudo y algunos de ellos se ven coronados con una cruz, como sucede con el de Santibáñez el Alto (Cruz de la Orden de Alcántara) .



Rollo de Santibáñez el Alto

La ubicación de estas construcciones, en numerosas ocasiones, daban nombre a la zona donde se instalaban. De esta manera no nos debe extrañar la proliferación de plazas con el nombre de “Plazas del Rollo”, como sucede en Coria, donde según una fotografía recogida del libro de Publio Hurtado “ Castillos y Casas Fuertes de la Provincia de Cáceres” en la actual plaza del mismo nombre existió una construcción de este tipo y que en la actualidad ha desaparecido muy probablemente fruto del desarrollismo sesentero.




Rollo de Coria (Plaza del Rollo)

Por suerte, en otro caso, como el del Rollo de Torre de Don Miguel, éste fue rehabilitado por el estudiosos de la Villa Don Telesforo Torres, quien se encargó de buscar todas las piezas del mismo que en un huracán desperdigó por los alrededores de su ubicación original.




Rollo de Torre de Don Miguel

miércoles, 9 de diciembre de 2015

SIERRA DE GATA SARCÁSTICA

Villamiel es para mí una población especial, llevo muchos años vinculado a esa villa por diferentes motivos. La primera vez que pisé sus calles fue para visitar a una amigas que habíamos conocido en las fiestas de Acebo y de las que nos habíamos quedado prendados. Como por aquellas fechas no teníamos coches para desplazarnos hicimos lo que ya habíamos practicado en otras ocasiones, nos pertrechamos de unas mochilas y de unos sacos de dormir y nos fuimos a pasar un fin de semana a Villamiel y Trevejo.
Recuerdo como si fuese hoy mismo la entrada en ese pueblo; se respiraba en sus calles un aire de intelectualidad, no sé si porque por ellas estaba acostumbrado a transitar mi amigo Domingo Domené o porque éste había sido su primer alcalde desde la llegada de la democracia y se había encargado de conservar y recopilar todo el pasado histórico de Sierra de Gata. Yo por aquellas fechas todavía no lo conocía; aunque sin sospecharlo me encontraba muy cerca de él.
La noche la pasamos de peña en peña con nuestras amigas y a altas horas de la madrugada nos fuimos a dormir al monte, cerca del caso urbano. A la llegada del alba y ante los dolores de espalda decidí levantarme y visitar el pueblo. Al primer sitio que me dirigí fue a la iglesia, nada que ver con la catedral que tenemos en Acebo; circunvalando el entorno de la misma me fijé en dos sillares de uno de sus muros exteriores. Estuve un buen rato observándolos hasta que conseguí descifrar lo que en ellos una mano anónima había grabado con un cincel virtuoso. 






El sarcasmo del amanuense quedó de esa manera imperecedero en el tiempo y nos legó unas frases que pasados los siglos nos llaman a la reflexión más absoluta sobre nuestra presencia en este mundo de los vivos.


  

viernes, 4 de diciembre de 2015

DEMOGRAFÍA DE SIERRA DE GATA



Nuestros pueblos se mueren, llevan muchos años languideciendo ante la indolencia de las administraciones públicas que se justifican alegando que ellas han intentado fijar la población a la tierra mediante el insidioso P.E.R.
Llevo mucho tiempo atreviéndome a vaticinar que a la mayor parte de los pueblos de Sierra de Gata le quedan de vida, si la situación actual no cambia, como mucho entre quince y veinte años de vida .
En las últimas décadas se ha producido un transformación muy profunda en los diecinueve municipios de nuestra comarca y éstos han pasado de ser poblaciones agroganaderas a convertirse en inmensas urbanizaciones de viviendas de segunda residencia. Todos los años siguen emigrando de estas tierras decenas de jóvenes que continúan sin ver ningún futuro en ellas. Ese abandono paulatino ha provocado la pérdida de una riqueza etnográfica, antropológica, histórica, económica y sociológica que ha transformado el tejido social de la comarca.
Pero más allá de ese modelo implantando desde el apparatchik extremeño lo cierto es que la evolución que ha sufrido España en las últimas décadas, unida a una prolongada crisis económica que ha martilleado los bolsillos pudientes de numerosas familias serragatinas, ha provocado que las segundas y terceras generaciones de los descendientes de los primeros emigrantes serranos se cuestionen el sostenimiento económico de numerosas propiedades heredadas, que han pasado a convertirse en artículos de lujo.
Cuando muchas familias descendientes de miembros de Sierra de Gata se enfrentan ante los problemas económicos derivados de esta crisis económica no les queda más remedio que eliminar esos gastos suntuosos; que no son ni más ni menos que sostener una segunda residencia de la que sólo se hace uso al año durante veinte días; mientras que no les queda más remedio que hacer grandes cábalas diarias para hacer frente a los gastos del día a día.
Pero además se está produciendo un proceso de urbanización en toda la provincia de Cáceres que al igual que ha sucedido en otras zonas geográficas peninsulares, décadas atrás, está concentrando a las gentes de las zonas rurales en los núcleos urbanos más poblados; ya que éstos cuentan con mejores servicios al haberse visto beneficiados por un criterio sinérgico desde la administración autonómica.

   

Ese envejecimiento social de los pueblos de Sierra de Gata se ve acentuado por un desarraigo juvenil a los que a muy temprana edad se les obliga a asistir a centros educativos a cientos de kilómetros que los desvinculan de sus poblaciones de origen.
Además el amplio incremento de la motorización que ha experimentado la sociedad serragatina; así como una profunda mejora de las vías de comunicación de nuestra Comarca ha provocado una reducción del tiempo empleado para desplazarse de un lugar a otro; hecho que ha posibilitado el que alguien desde una población como Moraleja o Coria pueda gestionar una explotación agrícola-ganadera en el rincón más apartado de la Sierra.
Por otro lado el incremento de la renta per cápita de España ha dado lugar a un cambio en los hábitos de consumo. Mientras en las décadas de los años setenta y ochenta la población serragatina y sus descendientes estaban acostumbrados a pasar la totalidad de sus vacaciones en los distintos pueblos de nuestra Comarca, hoy en día prefieren pasar únicamente la semana de las fiestas locales y el resto de sus vacaciones distribuirlas a lo largo del año por diferentes sitios y países. Esto ha profundizado aún más en la crisis económica en la que están sumidas estas poblaciones y que por ende repercute en la demografía comarcal.
Tampoco se ha sabido revertir el éxodo migratorio implementando políticas migratorias que sedujesen a todos aquellos mayores jubilados, que en sus años jóvenes y al calor de la prosperidad económica que vivieron se construyeron grandes casas por los pueblos de la Sierra con la idea de retornar una vez jubilados.
Pero quizás el efecto más perjudicial al que se han visto sometidas las poblaciones de esta Comarca extremeña es el efecto de la gentrificación que han provocado durante décadas las generaciones de emigrantes cuya prosperidad económica ha favorecido un incremento de los precios de las viviendas y de los terrenos rústicos. A éstos se les han unido en los últimos tiempos los llamados Neorrurales, cuya aparición por la Sierra ha servido para encarecer aún más las viviendas y los terrenos rústicos, por algunos de los cuales estos últimos han llegado a pagar cifras millonarias.   

CASTRO DE IRUEÑA



Para mí Sierra de Gata no es sólo la parte de esa estribación montañosa que vierte sus aguas al lado extremeño. Yo siempre he defendido la integralidad geográfica de los territorios y está claro que Sierra de Gata hunde sus raíces en tierras salmantinas, extremeñas y una pequeña parte de ellas que penetran en territorio portugués.
Esa vertebración territorial la supieron ver y adaptar a su economía tanto los pueblos luso-vetones como los romanos; ya que fueron capaces de articular un primitivo sistema viario que el Imperio Romano supo conservar y mejorar, y que nos ha sido legado hasta nuestros días; puesto que buena parte de las carreteras que circundan estas tierras asientan sus cimientos sobre el trazado de esas antiguas vías de comunicación.
Durante años he leído libros sobre un primitivo asentamiento humano cercano a la población salmantina de Fuenteguinaldo. Villa charra de gran tradición taurina que sirvió de cuartel general al Duque de Wellington en su lucha contra las tropas del Gran Corso.
Este mes de septiembre me decidí a visitarla y aunque las referencias que tenía de ella no especificaban bien su ubicación, y espero que los lectores de este blog me perdonen yo tampoco voy a facilitarla para evitar el expolio al que ha sido sometida durante estos años, conseguí localizarla en lo alto de un cerro cerca del río Agueda.
Me quedé maravillado porque, aunque cuando uno visita este tipo de restos arqueológicos espera encontrarse ciudades míticas con edificios como los de Petra o Machu Pichu, pude descubrir un recinto amurallado de pizarra de unos tres metros de grosor en algunas zonas y cuyo perímetro abarcaba varias hectáreas de terreno.

 

Después de pasarme toda la mañana dando vueltas por entre infinidad de robles pude divisar los primeros resto de un primitivo edificio. Lo inmediato que apareció ante mi vista fueron los restos de unas columnas y algunos sillares de granito. A medida que me acercaba a esos restos arqueológicos me topé con varios sarcófagos labrados en granito.


Durante más de una hora estuve sentado contemplando esas maravillas arqueológicas que mis antepasados habían dejado ahí para que sus descendientes tuviésemos conciencia de la grandeza que hace siglos reinó en nuestras tierras.
Pero todo el tiempo que permanecí sentado a la sombra de esos robles y rodeado de todo ese granito labrado con gran esfuerzo e inteligencia por mis antepasados una obsesión no paraba de rondarme por la cabeza y ésta no era otra que localizar lo que algunos visitantes de este yacimiento arqueológico habían pasado a llamar la Yegüa de Irueña.

 

A pocos metros de los restos anteriores pude localizar la escultura de un inmenso toro vetón conocido por la Yegüa de Irueña y que se encontraba hundido en el suelo y partido por la mitad. A pesar del daño inflingido contra él, éste se erguía altivo desde las profundidades en las que le habían intentado sepultar algunos ignorantes avariciosos de oros y riquezas. 


lunes, 30 de noviembre de 2015

LA NEVERA DE JALAMA




La Nevera de Jálama, como tradicionalmente se la conoce, es una construcción octogonal de grandes sillares de granito, perfectamente trabajados, y que se encuentra embutido en el suelo de esta cumbre emblemática de Sierra de Gata.
Esta obra de ingeniería civil sirvió en su origen como nevero para almacenar la nieve del invierno que sería posteriormente consumida en los tórridos veranos de esta zona noroccidental de Extremadura.  
Hoy en día se encuentra en total estado de abandono, habiéndose convertido en un vertedero de basura de los mal llamados senderistas que visitan la zona. Esperemos que algún día las instituciones públicas se preocupen por su recuperación.





sábado, 28 de noviembre de 2015

INCENDIO DE SIERRA DE GATA, AGOSTO DE 2015


En estas condiciones se encontraba el monte de Acebo en las fechas del incendio de este verano. En uno de mis muchos días de senderismo en julio de este año pude sacar estas fotos de este vertedero ilegal en la zona del Montechico, próximo al chajurdón de Telesfora.
Este es sólo un ejemplo, porque me encontré casos similares por la zona de la Cantera y en la zona del Puerto. ¿Cómo no iba a haber un incendio de tales magnitudes?






miércoles, 25 de noviembre de 2015

XALIMEGU



En las últimas décadas ha surgido una intensa polémica sobre la lengua que se habla desde hace siglos en los tres pueblos situados al otro lado de Jálama más próximos a la frontera portuguesa. Para unos es una lengua arcaica con fuerte influencia portuguesa e injertos de la lengua leonesa y el castellano antiguo; para otros es una lengua evolucionada de un primitivo gallego que trajeron a estas tierras emigrantes venidos del antiguo reino galaico y que repoblaron este valle con la consolidación de la Reconquista cristiana.
Yo tengo amigos y conocidos en ambos bandos; por un lado se encuentran José Luis Martín Galindo  y Antonio Corrdera y por el otro Xoxé Henrique Costas y Domingo Frades. Por más que he intentado hacer un esfuerzo para entender las razones de unos y otros sigo sin aclararme, y me temo que como a mí les está pasando a la mayor parte de los que estudiamos la Comarca, por no hablar de aquellos vecinos alejados de estas lidias.
La última polémica ha surgido entorno a una denominación que se está intentado imponer desde determinados sectores para buscar un nombre común al mañego, al lagarteiro y al valverdeiro y que han decidido que sea XALIMEGU. 
En el mes de septiembre mi amigo Gustavo me llevó a cenar a Casa Laura en Valverde del Fresno. Este local había ganado de nuevo el premio a la tapa de Sierra de Gata y tuvieron la gentileza de abrir sus puertas en exclusiva para nosotros; ya que al día siguiente se iban de vacaciones. Mientras cenábamos el dueño departió con nosotros y nos enseñó la primera carta de restaurante escrita en valverdeiru, pero además nos obsequió con un tarro de mermelada de moras casera elaborada por ellos. Me fijé en la etiqueta y al leerla me surgió la duda sobre el nombre de la marca que habían adoptado; al pedirle que me aclarase si ese nombre de la marca se refería a la última tendencia para denominar a la lengua de esos tres pueblos de Sierra de Gata, el gerente de Casa Laura me aclaró que XALIMEGU era un acrónimo inventado por ellos que significaba Xálima, mermelada, groumet. Me quedé sin palabras sinceramente, el nivel de esperpento al que se está llegando sobre este tema parece no tener fin. 
En todo este tiempo que llevo visitando Sierra de Gata he tenido una suerte y una desgracia. La fortuna fue cuando en una excursión que realicé cuando tenía dieciséis años, junto a unos amigos al pueblo de San Martín de Trevejo para visitar a unos liges que nos habíamos echado, pude escuchar por primera hablar en Mañego; una lengua que me maravilló por su dulzura y su templanza, muy alejada de la sonoridad altanera de la lengua del pueblo de mis antepasados.
La desgracia la he vivido en los últimos años cuando he contemplado impotente como desparecía la lengua leonesa en Acebo y en otros municipios serranos de los alrededores; la emigración, la influencia de los medios de comunicación castellanos, la aculturación, la influencia de una escuela castellanohablante, el desprecio de esa lengua por la clase social adinerada y por la intelligentsia local, así como unas vías de comunicación que han abierto la Comarca al mundo es lo que ha acabado con esta lengua centenaria en tierras extremeñas.    

domingo, 22 de noviembre de 2015

NACIMIENTO RÍO ÁNGELES, DESCARGAMARÍA



Uno de los parajes más bellos y que muy pocas personas conocen es el nacimiento del río Ángeles cerca de la población de Descargamaría. Próximo al muladar donde los buitres de la zona suelen acercarse a alimentarse se halla un desnivel que da lugar a un bello salto de agua por donde discurren las aguas del río Ángeles.
Este acantilado junto con el de la Cervigona en Acebo hacen las delicias de cualquier escalador avezado. Ambos están rodeados de un entorno privilegiado en el que la naturaleza da lugar a formaciones caprichosas.
La excursión hasta ese salto de agua se inicia en Descargamaría por una pista sinuosa y de amplio desnivel, que después de un gran esfuerzo nos deja en una poderosa cumbre desde la que se puede otear un magnífico horizonte que nos permite recorrer con la vista las tierras de las Hurdes y buena parte de la campiña meridional de Extremadura.  

CRUZ PROCESIONAL SAN MARTÍN DE TREVEJO SIGLO XII



En el Archivo Provincial de Cáceres se conserva una cruz procesional forjada en hierro y con algún que otro esmalte fechada en el siglo XII; y que, aunque bastante tosca, guarda todas las características de la orfebrería y forja de la Edad Media. 
Durante siglos fue usada en todas las procesiones que recorrieron la villa mañega hasta que se decidió que debido a su importancia era necesaria su conservación en un lugar con las suficientes medidas de seguridad.
Esta cruz confirma la recristianización de las tierras de nuestras Comarca que durante siglos fue un paraje deshabitado; aunque con algún que otro pequeño asentamiento humano que era víctima de las continuas razzias de los ejércitos tanto cristianos como musulmanes.



sábado, 14 de noviembre de 2015

EL BAÑO DE LA COCHINA


Hace varios años, en pleno verano, mi madre me habló de un lugar en Villasbuenas de Gata conocido por el Baño de la Cochina. Ella se había percatado de un problema de piel que tenía en un codo de uno de mis brazos y me recomendó ir a esa especie de balneario con el objetivo de tomar unos baños para ver si ese problema de piel desaparecía.
Jamás he sido muy creyente de esos lugares con propiedades medicinales, pero como no tenía mucho más que hacer ese verano me decidí a visitarlo. Nos montamos en el automóvil y después de dejar a un lado la población de Villasbuenas de Gata nos dejamos conducir por una pista de tierra que finalizaba en un  encinar cerca del río que alimenta el embalse de la Rivera de Gata; allí hay una construcción y en uno de sus laterales se encuentra, en una depresión del terreno, una especie de graderío circular en cuyo centro se embalsa un agua de color verdoso esmeralda a la que todos le atribuyen poderes curativos.
El origen de tales poderes parece ser que se debe a la composición de esas aguas y a las que la tradición oral local atribuyó hace décadas la curación de una cerda que no podía andar y su piel se encontraba llena de pústulas. El animal después de revolcarse en esas aguas se curó milagrosamente.
Desde entonces son miles de personas las que, hasta del extranjero, vienen a este lugar para darse baños en estas aguas con la idea de curar sus dolencias y sus problemas de piel.
Yo me bañé como hicieron todos los que allí encontraban y aunque no noté ninguna mejoría inmediata, si es cierto que con el paso de los años ese problema de piel desapareció. Me imagino, o quiero creer, que en algo debieron contribuir esos baños.

  

lunes, 9 de noviembre de 2015

A TRAVÉS DE LA SIERRA DE GATA, el país del aceite de oro 1929




Me gustaría recomendar a los lectores de este blog uno de los primeros libros que se escribieron sobre Sierra de Gata, si no el primero de ellos. Bajo el pseudónimo del Bachiller de Trevejo, Daniel Berjano escribió este interesante libro en 1929; de apenas 38 páginas cuenta en su interior con unas muy interesantes fotografías de los pueblos de nuestra Comarca, como la que se muestra al pie de esta página.



domingo, 8 de noviembre de 2015

EL MOJETEO



El Mojeteo es una de las señas de identidad de los acebanos. Esta ensalada de cítricos, cebolla, aceitunas, huevos cocidos, bacalao, pimentón, sal y aceite es una de las esencias gastronómicas de Sierra de Gata. Esta comida hasta hace siglos sólo se podía encontrar en Acebo debido a que es el único municipio de nuestra Comarca en el que se cultivaban sus afamados cítricos. Hoy en día se ha adaptado y actualizado en las ofertas culinarias de otros municipios serranos.
No obstante siempre nos hemos preguntado de dónde procede. Alguien, no hace mucho tiempo y en un punto de la geografía ibérica  bastante suroccidental, me contó una leyenda, que la verdad es que me pareció muy atractiva, ésta decía así:


Los ejércitos de la imperial Roma cuando llegaron a la península Ibérica se proveían en sus largas campañas militares de los productos más básicos que encontraban sobre el terreno. Los legionarios romanos siempre abastecían sus cantimploras de los siguientes ingrediente:

-Cítricos de Persia.
-Salazones de Agadir.
-Aceite penínsular.
-huevo cocido.

Esta fuente alimenticia fue posteriormente heredada por los ejércitos del profeta Mahoma, los cuales se encargaron de  preservar  la cultura fenicia, griega,romana y visigoda de la península Ibérica.

A esta comida, hoy en día, en la parte meridional de la península se la conoce por el nombre de Remojones;  nosotros en Acebo la conocemos por el nombre de Mojeteos.





Singularidad de la emigración acebana en la provincia de Madrid


Acebo probablemente fue uno de los primero pueblos de Sierra de Gata en el que sus gentes hicieron las maletas en busca de un mejor porvenir. La emigración acebana, tanto la de principios del siglo XX como la de la segunda mitad del mismo, se centró principalmente en la venta de productos fabricados o cultivados en dicha localidad. 
El encaje de bolillos fue la materia prima esencial con la que contaron infinidad de familias acebanas, que se desparramaron por muchos de los rincones de la geografía nacional, para mejorar su nivel de vida. No obstante merece la pena destacar la labor comercial que desarrolló el grupo de acebanos que se asentó en la provincia de Madrid y que al calor de un turismo que el régimen dictatorial empezaba a tolerar iniciaron una actividad comercial, que con el tiempo se convirtió en una fuente de negocios muy lucrativos y prósperos.
los comienzos no fueron nada fáciles y su labor comercializadora y la dura competencia que ejercieron contra los comercios vecinos quedó plasmada en diversos artículos, como el del diario Pueblo, en los que se denunciaba su actividad.


La evolución de social de ese grupo de acebanos asentados en la provincia de Madrid, que hasta épocas muy recientes tuvo como característica principal su carácter endogámico, lo dejé plasmado en un extenso artículo que publiqué en la Revista de Estudios Extremeños en el año 2007. Para todos aquellos que tengáis interés en el mismo os adjunto el siguiente enlace para su descarga.




martes, 3 de noviembre de 2015

ESTELAS DIADEMADAS Y DE GUERREROS EN SIERRA DE GATA


Estela diademada Hernán Pérez


En Sierra de Gata se han localizado varias estelas de guerreros y diademadas que se creen estar vinculadas a una cultura atlántica; ya que éstas tan sólo se han hallado en la zona más occidental de la península ibérica. Las más interesantes son la estela diademada que se encuentra en el Museo Arqueológico de Madrid (Imagen superior), la estela de diademada realizada en pizarra de Robledillo de Gata (Museo Provincial de Cáceres) y la estela de un guerrero que se conserva en el Ayuntamiento de San Martín de Trevejo. 
La estela diademada que se vincula a una temática femenina se localizó en Hernán Pérez, que es uno de los municipios de Sierra de Gata en el que se han localizado el mayor número de restos arqueológicos de la época del Bronce final; época a la que se cree pertenecen todas estas estelas.
El megalitismo, la adoración a antiguas divinidades protohistóricas o prehistóricas estuvo por tanto también presente en nuestra comarca. Esa cultura y el que esas lajas de piedra labradas con enigmáticas imágenes esquemáticas hayan llegado hasta nuestros días da una idea del respeto a una cultura milenaria que permanece intrínseca en el alma serragatina.  


Estela diademada Robledillo de Gata

La depuración del Magisterio Primario de Sierra de Gata durante la Guerra Civil



El magisterio de la primera enseñanza fue duramente perseguido y sometido a un exhaustivo proceso de depuración una vez finalizada la Guerra Civil. La idea de los vencedores era eliminar de la escuela española cualquier proceso de adoctrinamiento contrario a los ideales del nuevo régimen. Por este motivo éstos se encargaron de separar de la escuela a todos aquellos que en los años de la II República habían dado alguna muestra de afinidad política a las ideas republicanas, marxistas o librepensadoras. A ese engranaje inquisitorial no le tembló el pulso a la hora de asesinar a algunos de esos docentes; como fue el caso del maestro de San Martín de Trevejo, oriundo de Perales del Puerto, Pedro Rivero que fue fusilado en Cáceres por ser considerado marxista y usar su ascendiente sobre los alumnos y los obreros locales para extender ideas contrarias a los sublevados. (Foto superior de Pedro Rivero Ramos con sus alumnos).

Para todos aquellos que queráis profundizar en este tema tan delicado os adjunto el enlace para que os descargéis el trabajo de investigación que sobre este tema publiqué en la Revista de Estudios Extremeños en el año 2012.


SETENTA AÑOS DE ESCUELA RURAL EN ACEBO



Los pueblos no son nada sin la educación y la cultura, por ello uno de mis máximos intereses era recuperar la historia de la escuela rural de Acebo. A través de la comunicación que presenté en los Coloquios de Extremadura en el año 2008 esa investigación pudo ver la luz y de esa manera toda una historia de docentes y alumnos vio la luz definitivamente.
El enlace para poder descargarse el texto es el siguiente:


lunes, 2 de noviembre de 2015

La retaguardia franquista en Sierra de Gata (la actuación de las milicias nacionales: Requetés y Falange)


Con el inicio de la Guerra Civil fueron muchos los vecinos de Sierra de Gata que se vieron obligados a alistarse en el ejército de los militares sublevados y ello a pesar de que un buen número de ellos habían pertenecido a partidos de izquierda durante la II República.
Los militares sublevados contaban entre sus filas con infinidad de oficiales pero carecían de soldados rasos a los que dirigir; por ello se vieron obligados al inicio del conflicto a aceptar entre sus filas a todos aquellos que ideológicamente eran sus enemigos. Con el avance de la guerra y ante una inminente victoria fueron depurando sus filas de todos estos voluntarios, entre comillas, que lo único que buscaban era preservar su integridad física. No obstante hubo gentes interesadas en sus localidades de origen que en las fichas de afiliación a Falange se encargaron de dejar bien claro la procedencia ideológica de los mismos, como se puede observar en la imagen superior. 
Toda eso documentación se conserva celosamente custodiada en el Archivo Militar de Ávila; pero la normativa que se aprobó hace unos años me permitió consultar la información relativa a los pueblos de Sierra de Gata y gracias a ello pude intervenir con una comunicación en los Coloquios de Extremadura del año 2011.


Para todos aquellos que os mostréis interesados en consultar dicha comunicación os adjunto el enlace para que os la podáis descargar.




EL CONVENTO DE SANTIAGO DEL AZEVO



Los restos arqueológicos del Convento de Santiago del Azevo, situados a los pies del Cerro Moncalvo, muestran todavía la magnificencia y la sobriedad de esa orden religiosa que inundo con su presencia todos los rincones de nuestra Comarca, Los Franciscanos Observantes.
Todavía se mantienen en pie un señorial pórtico y bellos sillares de granito labrados por las manos expertas de canteros venidos de otras tierras. El paso del tiempo, el abandono, las guerras y la desidia de sus muchos propietarios han sido los que han abocado a este triste final a uno de los conventos con más vida que tuvo nuestra Sierra de Gata.
Mi amigo Vicente Calderita hace décadas intentó salvar del olvido el escudo que yacía tirado a la orilla del arroyo que regaba con sus aguas la huerta de estos frailes. Por ello se vio envuelto en un desagradable proceso judicial que estuvo a punto de ocasionarle un serio disgusto. Hoy en día ese escudo de la Orden permanece olvidado en un almacén de una casa de Hoyos.



Mi interés por la vida de este convento y de sus moradores se fue incrementando con los años y con la documentación que recopilé en distintos archivos conseguí escribir un artículo en el año 2012 que fue publicado en la revista eclesiástica Cauriensia. 




Para todos aquellos que estéis interesados en el mismo este es el enlace para poder descargárselo.